Los altos niveles de glucosa en la sangre en
conjunto con la mala circulación hace que la piel del diabético se vuelva más
seca y no sólo eso, sino que además es más propensa a sufrir de infecciones.
En lo general, los diabéticos tienen la piel más
seca que la mayoría de las personas que no lo son.
El cuidado de la piel en los pacientes con
diabetes es realmente esencial, toda persona debe aprender sobre los cuidados
de la piel en diabéticos, ya sea para su propio bienestar o para el de algún
familiar en esa situación.
El aumento de los
niveles de glucosa en la sangre, nos lleva a tener una piel más seca por lo
tanto propensa a tener:
- Agrietamiento
- Úlceras
- Heridas
y
- Lesiones
Los niveles altos de glucosa en la sangre también
fomentan el desarrollo de: